Vida Pétalo®

El huevo es un alimento muy nutritivo y versátil, lo puedes preparar de muchas formas distintas, pero la más saludable es sin duda el huevo duro o cocido.

El problema es que a veces se rompen, la yema no queda centrada o se tiñe de un tono verde desagradable. Pero si quieres hacer un huevo perfecto, ¡es fácil!

1. Por a hervir agua en un recipiente. Debe ser suficiente para que cubra por completo al huevo. Puedes hacer más de uno a la vez.

2. Cuando el agua esté caliente, pero antes de hervir, añade un puñado de sal por cada huevo, y un chorrito de vinagre. La sal te ayudará a estabilizar el huevo y que la yema quede centrada; el vinagre, a que el cascarón no se rompa fácilmente con el calor del agua.

3. Al soltar el primer hervor, coloca el huevo (debe estar a temperatura ambiente) y muévelo constantemente con una cuchara durante los primeros 3 ó 4 minutos. Esto ayudará que se cocine bien por todos sus lados. Después, deja que siga hirviendo por otros 7 u 8 minutos.

4. El huevo debe hervir durante 10 ó 12 minutos. SI lo dejas más, la yema se pondrá verde, y si es menos, no se endurecerá lo suficiente.

5. Retira del agua, ponlo en un colador y llévalo bajo la corriente de agua fría para detener la cocción. Cuando el cascarón esté lo suficientemente frío, pélalo con las manos.

Si olvidaste sacar los huevos una hora antes para que estén a temperatura ambiente, debes ponerlos en el agua cuando está fría para que se calienten poco a poco; cuando comience a hervir, espera 10 minutos para retirar del fuego.

Si colocas los huevos fríos en el agua hirviendo, es más probable que se rompan y que las yemas se pongan verdes.