Siempre es un buen momento para reutilizar materiales que de otro modo se convertirían en basura. Para esta Navidad, ¿no te gustaría hacer con tus hijos, uno simpáticos muñecos de nieve?
Son estupendos adornos para la sala o los cuartos, y los materiales son fáciles de usar. Lo mejor es que puedes improvisar con cualquier material de reúso que tengas en casa, sólo necesitas dejar salir tu creatividad e invitar a tus pequeños a que se unan a ti en esta divertida tarea.
Lo básico
Lo principal que debes tener en cuenta es que, para cada muñeco, necesitarás dos o tres objetos similares de tamaño distinto. Por ejemplo, tres cajas de cartón o tres latas de aluminio, una chica, una mediana y una grande.
Ahora, debes lograr que esas tres cosas sean de color blanco. Ya sea pintándolas o forrándolas con papel (como el de desecho de la impresora o los sobrantes de las tareas escolares de los niños). Estas piezas serás las "bolas de nieve" de tu muñeco.
Los detalles
Decora la "bola de nieve" más pequeña como un rostro. Pinta los ojos y la boca con un marcador negro o hazlos con foamy o cartoncillo, o botones para ropa negros. La nariz puede ser un recorte de papel naranja como una zanahoria, o un barquillo de helado.
Los brazos pueden ser dos ramitas, pero no todos los muñecos necesitan brazos para verse geniales.
Añade detalles: ponle otros botones para ropa, de color llamativo, para representar su abrigo, una bufanda y un sombrero para completar. Como sombrero puedes ponerle un sombrero de juguete, o usar una caja o lata más pequeña, ésta de color negro.
¡Tu imaginación es el límite!
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